domingo, junio 17, 2007

Un pequeño agradecimiento.



A Sara C. Vega, por concederme el honor de recordarme en tierras lejanas y milenarias.
En una semana donde poco tengo que festejar, una persona que está identificada más a mi pasado que a este presente en el que vivo, pero que poco a poco se ha vuelto parte importante en estos días, apareció para recordarme muchas cosas, entre ellas que mientras estuvo en España y sus viaje por algunos países y ciudades del viejo mundo me tuvo presente en su mente y me trajo unos cuantos presentes, uno bastante peculiar, un mini-calendario para el año 2008 con imágenes de Franz Kafka, también otro bastante interesante es un poster con la imagen de Anne Frank.
Estos momentos hacen valorar a uno el privilegio de pisar estas tierras, pero sobre todo, de estar rodeado de gente tan hermosa y valiosa.
Gracias.

1 comentario:

Ana Corvera dijo...

si algo falta mucha veces -en este mundo caótico, lleno de prisas y trivialidades- es encontrar, precisamente, esa cosa que nos llene de vida, que haga que nos invada un espasmo y de pronto todo cambie, como si hubieses fumado hashis o tomado mucha cerveza. ya me dieron ganas de leer esos diarios que tengo por ahi de kafka y sus cartas a milena. muchos besos