domingo, marzo 11, 2007

Introspección XXXV.

Hoy por la tarde, después de ver por la televisión a Atlantis, ídolo de los niños (antes de los técnicos, ahora de los rudos), pelear en la catedral de la Lucha Libre: Arena Coliseo, empecé con Italo Calvino y sus Seis propuestas para el próximo milenio.
He leído la propuesta primera: Levedad.
Levedad sobre el Peso. Ambos ubicados en el poder de la palabra. La idea es no abandonar la profundidad en el texto, pero sí hacerlo más ágil, menos pesado para el lector. Mientras más breve, conciso y directo, mejor. Esto no implica la extensión, no quiere decir que una obra de 600 páginas sea pesada o una de 150 sea breve. Es la forma, la estructura y la carga que se le den a las palabras en esas 150 ó 600 páginas.
Al menos es mi primera interpretación. Nunca definitiva, imposible.
No existe lo definitivo. Al menos no creo en ello.
Un ejemplo claro de la Levedad, dice Calvino está en La Insoportable Levedad del Ser de Milan Kundera, dixit:

(…) Es difícil para un novelista representar su idea de la levedad con ejemplos tomados de la vida contemporánea si no se la convierte en el objeto inalcanzable de una quete sin fin. Es lo que ha hecho con evidencia e inmediatez Milan Kundera. Su novela La insoportable levedad del ser es en realidad una amarga constatación de la Ineluctable Pesadez del Vivir: no sólo de la condición de opresión desesperada y all-pervading que ha tocado en suerte a su desventurado país, sino de una condición humana que nos es común, auque nosotros seamos infinitamente más afortunados. El peso de vivir para Kundera está en toda forma de constricción: la tupida red de constricciones públicas y privadas que termina por envolver toda existencia con nudos cada vez más apretados. Su novela nos demuestra cómo en la vida todo lo que elegimos y apreciamos por su levedad no tarda en revelar su propio peso insostenible. Quizá sólo la vivacidad y la movilidad de la inteligencia escapan a esa condena: virtudes que distinguen a esa novela, que pertenecen a un universo distinto del universo del vivir.

1) Un aligeramiento del lenguaje mediante el cual los significados son canalizados por un tejido verbal como sin peso, hasta adquirir la misma consistencia enrarecida;
2) El relato de un razonamiento o de un proceso psicológico en el que obran elementos sutiles e imperceptibles, o una descripción que comporte un alto grado de abstracción y
3) Una imagen figurada de levedad que cobre un valor emblemático, como en el cuento de Boccaccio, Cavalcanti saltando con sus delgadas piernas por encima de la losa sepulcral (…)

En un rato continuare con la Rapidez.

1 comentario:

Verena Sánchez Doering dijo...

la leveldad es dificil de escribirla y de vivirla
es verdad se toman con levedad las cosas es decir generalizando y la levedad son ganas y ligereza en el actuar
pero siempre esta el compromiso cuando se tiene madures y pertencia de vida
que tengas una linda semana y estes muy bien
besitos y cuidate



besos y sueños