viernes, septiembre 01, 2006

Introspección IV.

Sigo avanzando con la novela Zapata, lento pero seguro, ya se ha casado con Josefa. Nuestro caudillo también necesitaba amor, ese que la revolución, las tierras y el luchar por el pueblo no le pueden dar. Era un tipo solitario. Temeroso de todo. Inclusive de que el amor se le acabe. A todos nos pasa o nos ha pasado. A veces unos seguimos en la búsqueda. Gerardo Pablo dice que algunos andamos encadenados sin rumbo, por ahí persiguiendo el Grave, Crecido, Amplio, Mayor, Infarto y Ventajoso amor. Ese amor que calcina y duele en lo más hondo de las entrañas y nos hace viajar por lo más indescifrable del abismo, sin saber por qué, pero siempre encontramos algo: más preguntas alrededor de la primera duda que nos hizo sumergirnos en dicha búsqueda.
Y quien no quisiera de repente soltar todo y largarse, (…). Con amores fugaces e inolvidables, con parasiempres grávidos como espuma. (…). …y soñando que un día serás poeta.
Son días de oír constante el oído esa canción de espera o ese poema de resignación. Momentos de reflexión. Tal vez así como los personajes de Rulfo mi destino sea vivir o amar como un vil fantasma. Un alma en pena.
Duermo, despierto y salgo a caminar solo. Desayuno y como acompañado de un inmenso silencio. Me baño con el triste reflejo que proyecto en un espejo. Un muerto está más vivo que yo.
Silvio lo dijo bien en su canción Quien tiene viejo el corazón:

Dejando su lugar
entre las cosas que se dan amor,
quien tiene viejo el corazón
se va.

Huye a su habitación
llevándose lo que jamás llegó,
lo que ya nunca llegará:
su amor.

Hasta las altas sombras de la noche
la luz de su ventana brilla en vela.
La madrugada, que bien lo conoce,
dice que todo el tiempo sólo espera.

Van la luna y su corte a su guarida.
Canta de horror un pájaro en la güira.
Mira el gato con ojo incandescente.
Se siembra más el corazón de muerte.

La luna saca allí todos sus dientes
con una claridad indiferente.
La luna, la culpable, la viajera,
la luna de una muerta primavera.

Hasta las altas sombras de la noche
la luz de su ventana brilla en vela.
La madrugada, que bien lo conoce,
dice que todo el tiempo sólo espera.

A veces sólo somos canciones, poemas o novelas ya escritas y así actuamos, tal vez esté en nuestro inconciente plasmado, quizá uno se apropie de las historias tanto que con tal de hacerlas cercanas a nosotros buscamos actuar tal cual nos dicta la historia.
Mientras mi bienestar sentimental sufre una batalla Dantesca, mi país vive otra batalla de tipo político. No sabemos que va a pasar. Todo en esta ocasión es inédito: la elección, el movimiento ya social, ya político o mediático, el acto de impedir por primera vez que se diera el tan desgastado informe, por cierto dentro de las normas, aunque algunos escandalizados digan que todo esto es violento. Simplemente es un proceso para lograr la verdadera maduración política que nos pondrá al nivel de otros países. El cambio no consistía en que ganará Fox, va más allá. Todos, incluyendo Calderón y AMLO, sin dejar aun lado a los miles de mexicanos que están en plantón en las calles del DF, están poniendo un granito de arena para la evolución de nuestro México. En fin, dentro todo lo inesperado, cabe recordar la historia como lo hizo hoy en el estrado del congreso Alberto Escobar designado por el partido Verde Ecologista para dar su posición antes del informe no dado de Fox: siempre ha sido así criollos v. s. peninsulares y/o españoles, conservadores v. s. liberales, cristeros v. s. oficialistas, universitarios v. s. gobierno y ahora foxistas v. s. lópez obradoristas, En fin, así las cosas en nuestro México bronco.

1 comentario:

Indianguman dijo...

Me encantan tus instrospecciones.

Qué buen pez no piensa a menudo en soltar todo y largarse, en diluirse, en fantasmearse, qué se yo jeje (te lo dice otra pececita)

Tu novela ha de prometer

saludos!